La televisión en España apesta

Así de simple. Opino esto porque:

  • la mayor parte de la programación está ocupada por programas de cotilleos, donde participan personajes de escasa educación que discuten de malas maneras sobre temas banales. Televisión aborregando a la gente. Encima los niños ven a estos personajes como modelos a seguir.
  • otra gran parte de la programación está ocupada por los llamados "reality shows", que sirven para nutrir a los programas de cotilleos. Estos realitys se basan en la exaltación de los malos rollos, la promiscuidad... o en una desfigurada idea de éxito.
  • los servicios informativos son desinformativos. Aquí tenemos un amplio abanico de métodos para ensuciar un telediario, que van desde el engaño al contar una noticia, hasta el ignorar lo que no interesa e informar solo de lo conveniente. Sucede en cada edición, todos los días. A parte tenemos otros telediarios que realmente son espacios de publicidad [el de Antena 3], en los que en casi cada noticia que dan se percibe claramente que han cobrado por ello (estrenos de películas, nuevos discos, giras, nuevas tarifas y servicios de empresas...).
  • el deporte no se queda atrás. Guerras entre cadenas para emitir fútbol perjudicando a los aficionados dejando algunos partidos sin poderse ver de ninguna manera; noticiarios deportivos muy parciales para los que solo existe Real Madrid y Barça; retransmisiones de Fórmula 1 en la que el momento más importante de todo el campeonato sucede mientras la publicidad gracias a la avaricia de la cadena...
  • las series son siempre iguales. Casi siempre las mismas temáticas (comedias familiares, médicos, policías...), aunque al final luego se reduce todo a temas personales, amoríos entre personajes, peleas... Originalidad cero. Para colmo, capítulos larguísimos que ya empiezan tarde y acaban más tarde todavía.
  • se maltratan las series extranjeras, de mucha más calidad que las españolas, que no suelen recibir una atención adecuada y las colocan de madrugada, las cambian de horario, las quitan, estrenan las temporadas muy tarde...
  • las repeticiones de capítulos y programas son excesivas.
  • la programación infantil brilla por su ausencia. Los niños de hoy meriendan con Yola y Paquirrín en vez de con Oliver y Benji.
  • la televisión pública es igual de mala que la privada, pero encima recibe dinero de los impuestos.
  • no se respeta al espectador:
    • las series se cancelan o se cambian de horario rápidamente sin tener en cuenta a los que la ven.
    • los horarios de la programación no se cumplen.
    • la publicidad es excesiva. Ya no se contentan con los cortes publicitarios sino que ensucian la pantalla durante los programas con más anuncios en las esquinas de la pantalla, anuncios cada vez más grandes y que a veces llegan a ocupar toda la imagen.
    • las cadenas se pelean entre ellas colocando sus mejores series los mismos días que en la competencia, quitándose programas, actores...
Y así podríamos seguir hasta el día del Juicio Final por la tarde a última hora. Por eso no veo la tele. Prácticamente solo veo algún trozo de Camera Café o Sé lo que hicisteis la última semana, que sí merecen la pena. Todavía quedan algunas honrosas excepciones.

Para informarme, ver series de verdad, películas, incluso deportes, ya está Internet. De eso hablaremos otro día.

Y apunto una tendencia: no tener tele en casa se está poniendo de moda entre la gente medianamente culta. No me gustan las modas pero con ésta estoy de acuerdo porque tiene razón de ser: no hay nada que ver. El aparato llamado televisor se está convirtiendo en un símbolo de incultura.

1 comentarios:

Samu dijo...

Pues a mi no me gusta ni camera café, solo "Sé lo que hicisteis"...
Que mierda de tele tio...
J.Alberto | 12.09.07 - 4:57 pm

--------------------------------------------

eso es q no le has pillao el punto jeje pero el camera esta wapo!
Arquinquieto | 12.10.07 - 1:25 pm

--------------------------------------------
*Comentarios antiguos pedados manualmente para no perderlos al cambiar el sistema utilizado para la publicación de los mismos.